Me pregunto si me leerás. Me pregunto qué sentirás (si es que sientes algo) al saber que tu hija está torpemente intentando unir el alma que hiciste pedazos...
Hoy hace 22 años que respiré por primera vez. Me pregunto si habrás pensado en mí. Me pregunto si habrás pensado en cómo me encuentro, en cómo he pasado estos últimos 10 años. Ya casi hace más que no te conozco de lo que hace que te conozco. Han pasado 10 años desde que te fuiste, 10 años desde que me dijiste "encara que marxi sempre seràs la meva nena". Qué fácil es engañar a una cría de 12 años. Qué fácil es romperle el corazón. Qué fácil te ha resultado abandonarme.
A mí no me ha resultado fácil vivir sin ti.
Verás, siempre fuiste mi héroe, te admiraba como jamás había admirado nada. Recuerdo sentarme en el suelo de la habitación y mirarte mientras jugabas al ordenador. ¡Me podía pasar horas! y éso me hacía feliz. Recuerdo pasar tardes escuchando música contigo. Recuerdo preguntarte mil cosas sobre el inglés- mi pasión por esa lengua te la debo a ti. Aprendía cada vez que te observaba. Recuerdo los "cap de totxo". Recuerdo jugar encima de tu pecho y preguntarte por qué tenías un agujero ahí... Pero la verdad es que la mayor parte de mis recuerdos se han desvanecido. Supongo que mi mente está borrando aquello que hace tiempo desapareció: Tú. Aún así, jamás podrá borrar tu ausencia, las lágrimas derramadas por ti; el dolor que sentía cada vez que no me llamabas, que no me venías a ver, que no te preocupabas por saber cómo estaba...
Cuando te fuiste te llevaste una parte de mí y esa parte jamás la voy a recuperar. Siempre me va a faltar algo, siempre me vas a faltar tú en mis recuerdos. Lo peor de todo es que te has ido por voluntad propia, eso es lo que me resulta más desgarrador. Te fuiste porque no querías estar. no querías estar cuando obtuve matrícula de honor, no querías estar cuando elegí una carrera, no querías estar cuando me fui a vivir sola a Irlanda, no querías estar cuando conseguí mi primer trabajo, cuando me hice mi primer tatuaje, cuando me enamoré por primera vez y me rompieron el corazón. No querías estar cuando sufrí bullying, no querías estar cuando me insultaban por la calle y me amenazaban, no querías estar cuando tuve anorexia y no querías estar cuando me quería morir.
Siento tantas cosas cuando pienso en ti que no sé ni cómo expresarme. Siento lástima por esa niña de 13 años que se pasaba las noches llorando porque su padre no la había llamado. Siento lástima por esa cría que perdió parte de su infancia por tener que madurar de golpe. Siento rabia porque me abandonaste y me reemplazaste por unos niños que ni si quiera son de tu sangre. Siento rabia porque has pasado 10 malditos años cuidándolos y a mí no me has llamado ni 5 veces. Me doy pena por haberte dado otra oportunidad de romperme por dentro y me das pena por haberlo hecho.
Estoy llena de odio y rencor por tu culpa. Tú te quedaste una parte de mi luz y a cambio me dejaste con ésto. Jamás te voy a perdonar haberme arrebatado una parte de mi vida.
Con sinceridad,
tu hija.
No hay comentarios:
Publicar un comentario